Don’t cry Ceferino
Un pequeño Hotel de Chimpay atendido por sus devotos dueños Blanca y Sixto es visitado por el Dr. Rudbeck una eminencia del Vaticano y el padre Chiclana, un humilde cura de Tandil buscando confirmar un milagro para convertir en nada menos que Santo a Ceferino Namuncurá.